Los Seis Sonidos
Curativos (Liu Zi Jue) es una técnica tradicional del Qigong Médico. El
ejercicio que debe realizarse sentado en una silla y con la espalda recta.
Los 6 Sonidos
Curativos deben pronunciarse correctamente y 6 veces cada uno. Los sonidos
ejercen una vibración que afecta directamente a un órgano concreto depurándolo
y sanándolo tanto físicamente como emocionalmente.
Si deseamos
completar el ejercicio de sanación con una visualización, al inspirar
imaginaremos una luz que llega a nuestro órgano y lo tonifica al espirar
pronunciando el sonido visualizaremos como expulsamos las energías negativas de
nuestro órgano (enfermedades y emociones).
Los 6 sonidos
Curativos y sus respectivos órganos son los siguientes:
1. MADERA: Sonido
“XU” Tranquiliza el Qi (energía) del hígado, se usa para tratar enfermedades de
los ojos, dolor de cabeza, tics y también problemas faciales. Combate la
depresión, la ira, la frustración, el resentimiento, la amargura y el
desprecio.
2. FUEGO: Sonido
“KE” o “HE” Refuerza el Qi del corazón y se utiliza para tratar la inquietud,
las palpitaciones, el insomnio, las perturbaciones del sueño, la locuacidad. Se
recomienda para disminuir la excitación, el deseo y la alegría excesiva, los
celos y la avaricia.
3. TIERRA: Sonido
“HU” Refuerza el Qi del bazo y trata los problemas digestivos. Reduce la
reflexión excesiva y la obsesión.
4. METAL: Sonido
·”Si” Tonifica el Qi de los pulmones siendo indicado para combatir las
enfermedades pulmonares como la tos y el asma. Indicado para mitigar los
episodios de tristeza y de preocupación excesiva.
5. AGUA: Sonido “CHUI” Refuerza el Qi de los riñones y está indicado para los problemas de insuficiencia renal, eyaculación precoz y espermatorrea. Combate el miedo, los sustos, shock y ansiedades.
5. AGUA: Sonido “CHUI” Refuerza el Qi de los riñones y está indicado para los problemas de insuficiencia renal, eyaculación precoz y espermatorrea. Combate el miedo, los sustos, shock y ansiedades.
6. FUEGO: Sonido “
XI” Regula el Qi del Triple Calentador/SANJIAO. Se utiliza para tratar el
tinitus, la sordera, hinchazón de axila, dolor de muelas y la inflamación de
garganta.
¿COMO PODEMOS
PRACTICARLOS?
Con los ojos
cerrados se atiende al órgano (se pone la atención en el):
1.-HÍGADO: ponga la
lengua junto al paladar y con una exhalación lenta y prolongada, produzca el
sonido SSHHHHHHHHHHHH.
Al mismo tiempo que
elimina la rabia, la Ira, la cólera, la agresividad.
Si le viene a la
mente en ese momento una situación o persona que le produce rabia, cólera o
agresividad, no lo aparte de su mente, sino piense en ello mientras hace el
sonido para eliminar la situación o persona de su mundo interior, para
transmutarlo.
Durante los
periodos de descanso respire hacia el hígado y sonríale al tiempo que lo rodea
de una luz verde brillante. Sienta la virtud de la Amabilidad.
2. – CORAZÓN: Con
la boca completamente abierta colocando la punta de la lengua detrás de los
dientes inferiores haga una exhalación lenta y profunda al tiempo que produce
el sonido HAAAAAAAAA y elimina el orgullo, el odio, la soberbia, la impaciencia
y la prisa.
Si le viene a la
mente en ese momento una situación o persona que le produce esta emociones que
está eliminando, no lo aparte de tu mente, sino piense en ello mientras hace el
sonido para eliminar el odio, orgullo, etc. de la situación o de la persona.
Durante los periodos de descanso respire y sonría al Corazón al tiempo que lo
rodea de una luz roja brillante. Sienta la virtud del Amor, y la Felicidad.
3-BAZO: Ponga otra
vez la lengua junto al paladar y haga una exhalación lenta y profunda al tiempo
que produce el sonido GUUUUUUUUUUU ( desde la garganta como el sonido de
“Gemir”) y elimina la preocupación.
Si le viene a la
mente en ese momento una situación o persona que le produce preocupación, no lo
aparte de su mente, más bien piense en ello mientras hace el sonido para
limpiar la situación o la persona…
Durante los
periodos de descanso respire y sonría al Bazo al tiempo que lo rodea de una luz
amarilla brillante y siente la virtud de la Belleza que potenciará
positivamente este órgano.
4. PULMONES: Con la
lengua detrás de los dientes cerrados y con una exhalación lenta y prolongada,
producir el sonido SSSSSSS
Hacerlo con la intención
de soltar todas las tristezas y depresiones. Si viniera a la mente una
situación o recuerdo triste aprovechar para eliminarlo. Este sonido limpia de
toda tristeza al pulmón, el órgano donde se guardan estas emociones.
Al inspirar llevar
la energía del coraje, del valor y el buen ánimo a los pulmones. Sonreír y
brindarle amor a estos órganos. Conviene visualizarlos envueltos en una luz
blanca.
5.- RIÑONES: Formar
una O con los labios como si se soplase la vela de cumpleaños y con una
exhalación lenta y prolongada emitir el sonido HOOOOOO, al tiempo que se
elimina el miedo e inseguridad.
Si le viene a la
mente en ese momento una situación o persona que produce miedo e inseguridad,
no lo aparte de su mente, sino piense en ello mientras hace el sonido para
eliminar el miedo de la situación.
Durante los
periodos de descanso respire a los riñones y sonríele mientras le envía una luz
azul o negra brillante. Sienta la virtud de la Bondad y Paz.
6.-TRIPLE
CALENTADOR: Si es posible haga este ejercicio tumbado. Con la boca abierta
exhale lentamente el aire mientas hace el sonido HIIIIIIIIIIIIII. Cuando pare
para exhalar, trate de imaginar un rodillo grande que va aplanando el pecho, el
estómago y el abdomen, y siéntase vacío (es como cuando aplastamos con la mano
una bolsa de plástico para guardarla. Sonría al triple calentador (no es un
órgano).
Esto equilibrará todas
las energías activadas por los demás sonidos y relaja el cuerpo en general.
La práctica
habitual de estos ejercicios depura al organismo de energías negativas, hace
prevalecer nuevos y poderosos estados de conciencia de tal forma que se torna
cada vez más improbable caer en tristezas, depresiones, cóleras, miedos, etc.
Un estado de
completitud y felicidad se instala, nuestro estado de conciencia original.
Del mismo modo que
no podemos vivir sin aire, no puede existir vida humana sin sonido. El hallazgo
de los sabios del Asia antigua fue preguntarse cómo el sonido podía ser
utilizado para la mejora y evolución del ser humano. La respuesta es que sí, los
sonidos curan.
La vida humana se
desarrolla en un entorno sonoro: el sonido es connatural a la existencia.
La ausencia total
de sonido es materialmente imposible. Así, desde el origen de los tiempos, el
hombre ha vivido en un entorno repleto de sonidos procedentes de las diversas
manifestaciones de la naturaleza: el ulular del viento, el caer de la lluvia,
el canto de los pájaros, el crepitar del fuego, el rumor de las olas. Un mundo
lleno de armonía que ha conseguido influir física, emocional y mentalmente al
ser humano consiguiendo crear estados de relajación, de estimulación o de
armonización de la energía vital.
El sonido es la
vibración del aire, y así, como la vida humana se da en un medio aeróbico (es
decir, en el cual el aire es necesario para vivir), la existencia de sonido es
inevitable.
Pero también existe sonido en la vida prenatal. En el nivel más intimo, el sonido nos ha rodeado y alimentado desde el momento en que fuimos concebidos. En el instante en que el ovulo se fija en el útero de la madre se pone en contacto con un entorno sonoro: las pulsaciones del latido cardiaco, los ruidos intestinales, la respiración de la madre. A medida que el feto se desarrolla se da cuenta de la importancia del latido cardiaco que percibe como esencial para su vida dado que la disminución le supone una falta de oxigeno, de nutrición o de temperatura. Cualquier alteración en el mismo conlleva estados de estrés. El feto no oye el sonido a través del sistema auditivo sino a través de la percepción vibracional o energética.
Pero también existe sonido en la vida prenatal. En el nivel más intimo, el sonido nos ha rodeado y alimentado desde el momento en que fuimos concebidos. En el instante en que el ovulo se fija en el útero de la madre se pone en contacto con un entorno sonoro: las pulsaciones del latido cardiaco, los ruidos intestinales, la respiración de la madre. A medida que el feto se desarrolla se da cuenta de la importancia del latido cardiaco que percibe como esencial para su vida dado que la disminución le supone una falta de oxigeno, de nutrición o de temperatura. Cualquier alteración en el mismo conlleva estados de estrés. El feto no oye el sonido a través del sistema auditivo sino a través de la percepción vibracional o energética.
El sonido es una
forma de energía de manera activa en el desarrollo y evolución de la persona.
Así pues, con el
sentido pragmático que caracteriza a las culturas asiáticas, los filósofos y
sabios chinos e indios pensaron que si el sonido era un elemento constante,
omnipresente e inevitable en la existencia humana, podía ser utilizado como
medio hábil para su mejora física, mental y espiritual, del mismo modo que el
silencio meditativo lo era para los mismos fines.
* Artículo original en Evolución consciente
* Artículo original en Evolución consciente
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