En el equinoccio de Otoño, Mabon establece un equilibrio
entre el día y la noche. Las frutas y las verduras recogidas parecen vivas, aun
a pesar de haberlas separado de sus raíces. Las hojas caen de los árboles y
parecen muertas, a pesar de seguir con vida.
Este día festivo se relaciona con cuestiones de equilibrios y paradojas. Los contrastes se manifiestan por medio de la dualidad y la polaridad. Explora los misterios de la luz y la oscuridad, la tierra y el cielo, lo femenino y lo masculino, la carne y el espíritu, lo mortal y lo divino; como es arriba es abajo, porque todo está relacionado. El equinoccio es una época apenas perceptible que extrae poder como resultado de no ser ni una cosa ni la otra, pero a la vez ambas.
Venera a las deidades con aspectos duales. Jano es el dios romano de las puestas, también al pasado y al futuro. Hella, la diosa nórdica del inframundo, es mitad hermosa, mitad horrible. Hermafrodita, la deidad griega, es mitad macho, mitad hembra. Como decoración, elige contrastes fuertes entre colores como el blanco y el negro, o el marrón y el dorado. Como oficiantes, considera un sacerdote y una sacerdotisa, un joven y un anciano, o cualquier pareja divergente que manifieste el aspecto dual. Los lugares costeros, como la playa o la orilla del mar, atraen poder de distintos reinos. El crepúsculo es un momento intermedio que presta energía al Ritual.
El equinoccio de Otoño, es la terminación de la cosecha iniciada en Lammas. Una vez más el día y la noche son iguales, están equilibrados mientras en Dios se está preparando para salir de su cuerpo físico y empezar la gran aventura de lo invisible, hacia la renovación y el renacimiento de la Diosa.
La naturaleza decae, disminuye su generosidad, preparándose para el Invierno y su tiempo de descanso. La Diosa cabecea en el sol que se debilita, aunque el fuego arde dentro de su matriz. Siente la presencia del Dios incluso mientras Él decae.
Camina por lugares salvajes y bosques, recolectando vainas y plantas secas. Algunas pueden ser usadas para decorar la casa; otras guardadas para futura magia herbal.
Las comidas de Mabon consisten en las recolecciones de la segunda cosecha, así que predominan los granos, frutas y verduras. El pan de maíz es un alimento tradicional, al igual que las judías y la calabaza al horno.
RITUAL DE CELEBRACIÓN DE MABON
Decora el Altar con bellotas, ramitas de roble, conos de pino y ciprés, espigas de maíz, tallos de trigo y otras frutas de temporada y nueces. También pon ahí una pequeña cesta rústica llena de hojas secas de diversos colores y tipos.
Organiza el Altar, prende las velas y el incensario y forma el círculo. Recita un canto de Bendición. Invoca a la Diosa y al Dios. Párate frente al Altar, levanta la cesta de hojas y espárcelas para que caigan al suelo, dentro del círculo. Y di estas palabras:
Este día festivo se relaciona con cuestiones de equilibrios y paradojas. Los contrastes se manifiestan por medio de la dualidad y la polaridad. Explora los misterios de la luz y la oscuridad, la tierra y el cielo, lo femenino y lo masculino, la carne y el espíritu, lo mortal y lo divino; como es arriba es abajo, porque todo está relacionado. El equinoccio es una época apenas perceptible que extrae poder como resultado de no ser ni una cosa ni la otra, pero a la vez ambas.
Venera a las deidades con aspectos duales. Jano es el dios romano de las puestas, también al pasado y al futuro. Hella, la diosa nórdica del inframundo, es mitad hermosa, mitad horrible. Hermafrodita, la deidad griega, es mitad macho, mitad hembra. Como decoración, elige contrastes fuertes entre colores como el blanco y el negro, o el marrón y el dorado. Como oficiantes, considera un sacerdote y una sacerdotisa, un joven y un anciano, o cualquier pareja divergente que manifieste el aspecto dual. Los lugares costeros, como la playa o la orilla del mar, atraen poder de distintos reinos. El crepúsculo es un momento intermedio que presta energía al Ritual.
El equinoccio de Otoño, es la terminación de la cosecha iniciada en Lammas. Una vez más el día y la noche son iguales, están equilibrados mientras en Dios se está preparando para salir de su cuerpo físico y empezar la gran aventura de lo invisible, hacia la renovación y el renacimiento de la Diosa.
La naturaleza decae, disminuye su generosidad, preparándose para el Invierno y su tiempo de descanso. La Diosa cabecea en el sol que se debilita, aunque el fuego arde dentro de su matriz. Siente la presencia del Dios incluso mientras Él decae.
Camina por lugares salvajes y bosques, recolectando vainas y plantas secas. Algunas pueden ser usadas para decorar la casa; otras guardadas para futura magia herbal.
Las comidas de Mabon consisten en las recolecciones de la segunda cosecha, así que predominan los granos, frutas y verduras. El pan de maíz es un alimento tradicional, al igual que las judías y la calabaza al horno.
RITUAL DE CELEBRACIÓN DE MABON
Decora el Altar con bellotas, ramitas de roble, conos de pino y ciprés, espigas de maíz, tallos de trigo y otras frutas de temporada y nueces. También pon ahí una pequeña cesta rústica llena de hojas secas de diversos colores y tipos.
Organiza el Altar, prende las velas y el incensario y forma el círculo. Recita un canto de Bendición. Invoca a la Diosa y al Dios. Párate frente al Altar, levanta la cesta de hojas y espárcelas para que caigan al suelo, dentro del círculo. Y di estas palabras:
“Hojas caen, los días se enfrían. La Diosa tira su manto de tierra alrededor de Ella, mientras tú, oh gran Dios, navegas hacia el Oeste, a las tierras del encanto eterno, envuelto en la frescura de la noche. Las frutas maduran, las semillas caen, las horas del día y la noche están equilibradas. Vientos fríos soplan desde el Norte gimiente. En esta aparente extinción del poder de la naturaleza, oh bendita Diosa, sé que la vida continúa. Porque la primavera es imposible sin la segunda cosecha, al igual que la vida es imposible sin la muerte. Bendiciones sobre ti, oh Dios caído, mientras viajas a las tierras del invierno y a los amorosos brazos de la Diosa.” Descarga la cesta y di: “¡Oh benigna Diosa de toda fertilidad!, he sembrado y cosechado los frutos de mis acciones, buenas y malas. Dame el valor para sembrar semillas de alegría y amor en el año venidero, desterrando miseria y odio. Enséñame los secretos de la existencia sabia sobre este planeta, ¡Oh luminosa noche!” |
Puedes seguir con trabajos de Magia o dar el Ritual por terminado. Cierra el Círculo y celebra un banquete sencillo con productos de temporada.
*Este año el Equinoccio de Otoño empieza la madrugada del día 23, a las 4:29 hora peninsular.
* Textos: Elisabeth Barrette y Scott Cunningham
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